«Ocho». Exposición Colectiva
08 marzo 2021 – 23 abril 2021
Arquitectura de Barrio. C/Julián Calvo 6
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Hoy 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, inauguramos esta exposición colectiva que reivindica el papel de la mujer en el arte murciano del siglo XXI.
8 han sido las artistas elegidas, Carmen Baena, Virginia Bernal, Ángeles Espinosa, Perla Fuertes, Miriam Martínez Abellán, Elisa Ortega, Olga Rodríguez Pomares y Katarzyna Rogowic, 8 las distintas formas de trasmitir el arte y 8 sus diversas procedencias.
CARMEN BAENA – Guadix (Granada), 1967. Artista plástica
CARMEN BAENA – Guadix (Granada), 1967. Artista plástica
Horizontes en círculo
Se abren. ¡Cuántas pistas
De claridad, tan altas
Sobre el nivel del día,
Zumban¡
Jorge Guillén
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VIRGINIA BERNAL – Cartagena, 1970. Artista plástica
Trabajos fotográficos (cianotipia), en los que los temas representados son recuerdos de la infancia, objetos perdidos, experiencias vividas y formación como personas adultas. El paso del tiempo a través del saber y de la resbaladiza memoria,
nos ayuda a conocernos.
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ÁNGELES ESPINOSA – Lorca,1955. Escultora
Puertas a otra dimensión
El contraste entre líneas rectas y curvas; entre el rigor geométrico del plano, que no encierra, y la suavidad deslizante de la malla, que se escapa; entre lo estático y lo dinámico, entre lo fuerte y lo frágil, entre lo dicho y lo sugerido, entre el volumen y la trasparencia.
“Las cajas rotas”, sugieren una fuerza expansiva fluida, dinámica, líquida o gaseosa, que pugna por escapar del marco que apenas las contiene.
Francisco García Silva
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PERLA FUERTES. Alhama de Murcia. Pintora
Realismo murciano con exposición permanente en el Salón D´Autonne de París, el Carroussel del Museo del Louvre, Corea y otros. Su última exposición itinerante en Japón, organizado por el Salón D´Autonne de Paris.
«Esa cueva a la que tú temes entrar, contiene el tesoro que buscas»
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MIRIAM MARTÍNEZ ABELLÁN. Cieza,1978. Artista plástica
Artista visual y profesora con residencia en Murcia. Encontró en el collage analógico su verdadera forma de expresión. Recopila imágenes y objetos vintage. Reciclar y reinventar significados más una intensa reflexión sobre la figura femenina en todas sus facetas.
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ELISA ORTEGA. Madrid.1964. Artista plástica
Trabajar formas y materiales con el sustento del mundo de la estampación y la experimentación de lógicas representativas.
«Lo múltiple es lo que está plegado de muchas maneras». Gilles Deleuze.
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OLGA RODRÍGUEZ POMARES. Elche,1972. Drª en Bellas Artes
Bustos femeninos de barro cocido, pebeteros, bustos de Tanit, diosa cartaginesa, la luna y la fertilidad. Deméter, diosa griega, la agricultura, nutricia pura de la tierra verde y joven, “la diosa madre”. Resina, con cargas extraídas de la propia naturaleza, componiendo un altar. La instalación como modo de producción y visualización de la obra de arte, lo orgánico del cuerpo en contraste con el edificio. Piedra Bateig y metacrilato, personajes dibujados en vinilo, cariátides, figuras femeninas esculpidas, con función de columna o pilastra, un entablamento que descansa sobre su cabeza. mujeres convertidas en esclavas y condenadas a llevar la más pesada carga, mujeres que aguantan el peso del mundo.
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“A los cuarenta y tantos años era lastimoso andrajo de lo que algún día fue la mejor moza de diez leguas en contorno. El azul de sus pupilas, antes tan claro y puro, amarilleaba; su tez de albérchigo era piel de manzana que en el madurero se van secando, y los pómulos sobresalientes y la frente baja y la forma achatada del cráneo se marcaban ahora con energía, completando una de esas cabezas de aldeana”
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KATARZYNA ROGOWICZ. Polonia.1971. Artista poliédrica e ilustradora
Es a través de la creación artística la única manera que tengo de entender el mundo, de llegar al autoconocimiento. El arte tiene un potente efecto catártico: es un modo de expresar vivencias, emociones y sentimientos.
Y este es el camino que me ha llevado a crear esta obra, un objeto tan cotidiano como estrechamente ligado al rol que tradicionalmente se ha otorgado a la mujer, el de las tareas domésticas y el cuidado de los menores.
Se trata de un políptico de 6 paños de cocina titulado Bajka (cuento, en mi lengua materna), pero Bajka, en realidad, no cuenta nada: no representa ni traslada relato alguno, pues no se alimenta de una idea o historia previas.
Eludo como referencia cualquier posible verdad aprehendida y dejo que la pintura, libremente, mienta; sin propósito final, pero con un propósito continuo, de principio a fin: la mentira como herramienta del proceso creador y, a su vez, como falso hilo argumental.
Y como punto de partida escojo a Pinocho, el mito moderno y eterno que simboliza la mentira.
Sí hay, en estos paños y bajo mi punto de vista, una verdad incontestable: la de que han sido creados por una mujer para el uso y disfrute no solo de mujeres.
